Comprar un coche nuevo se ha vuelto todo un desafío. Buscamos un vehículo que no solo sea atractivo, sino que consuma poco combustible, ofrezca gran seguridad y, por supuesto, cuente con una de las etiquetas de la DGT que garantice el acceso sin restricciones a zonas urbanas en el futuro, como la etiqueta Eco o Cero. En este artículo, y en el video que incluimos, explicaremos las diferencias entre estas dos etiquetas, qué vehículos son elegibles para cada una, y qué beneficios ofrecen. Para ello, analizamos dos modelos del Seat León ST, uno de los coches más vendidos, que dispone de ambas etiquetas.

Antes de abordar el tema de las etiquetas, es importante aclarar un aspecto que genera mucha confusión y controversia: la diferencia entre las normativas que regulan el impuesto de matriculación y las que determinan la asignación de las etiquetas de la DGT, ya que no están relacionadas.

El impuesto de matriculación, que se abona al adquirir el coche y varía según las emisiones del vehículo, se basa en la cantidad de CO2 que este emite. Por ejemplo, el León e-TSi de gasolina con tecnología híbrida ligera paga un 4,75% de impuesto de matriculación debido a sus emisiones de 132 gr/km de CO2, mientras que el León e-Hybrid, con emisiones homologadas de 25 gr/km de CO2, está exento de este impuesto.

Las etiquetas medioambientales Eco y Cero se asignan a los vehículos en función de su tipología, no de sus emisiones de CO2.

Por otro lado, las etiquetas B y C de la DGT se basan en el cumplimiento de las normativas europeas anticontaminación, las cuales regulan gases nocivos como los óxidos de nitrógeno, el monóxido de carbono y las partículas, en lugar de limitar las emisiones de CO2. Las etiquetas Eco y Cero se otorgan en función del tipo de vehículo, independientemente de sus emisiones de CO2. La etiqueta Eco se asigna a vehículos híbridos y aquellos que usan gas, como GLP o GNC, mientras que la etiqueta Cero la reciben los híbridos enchufables con más de 40 km de autonomía eléctrica y los eléctricos puros.

Existe cierta polémica, ya que muchas personas consideran injusto que un coche sin etiqueta, aunque sea de bajo consumo, como un diésel de hace 20 años, no pueda acceder a áreas urbanas, mientras que vehículos de gran tamaño y alta cilindrada, que consumen y emiten más CO2, sí puedan hacerlo por contar con una etiqueta.

Etiquetas medioambientales de la DGT:

¿Qué coches obtienen?

Cualquier coche nuevo, ya sea de gasolina o diésel, que no cuente con ningún tipo de electrificación o adaptación para funcionar con gas, recibe automáticamente la etiqueta C de la DGT.

Para obtener la etiqueta Eco, un vehículo debe ser híbrido, como el Seat León e-Tsi, que está equipado con un motor de 1,5 litros y 150 CV, acompañado por un pequeño motor eléctrico alimentado por una batería de iones de litio de 48 voltios. Este tipo de sistema se conoce como híbrido ligero o Mild Hybrid, también llamado MHEV (Mild Hybrid Electric Vehicle) por sus siglas en inglés.